No ha salido como yo esperaba y, el concierto no fue el encargado de abrir la Navidad. Después de muchos años sufriendo y, de unos días peores, mi abuelo no celebrará con nosotros las fiestas este año. Eso será lo que marque y recordemos del final del 2008. Todo lo dramático que fue..

La entereza se perdió y apareció en mí, esa crisis que no sufrí a los 6 años como el resto de niños; el miedo a dejar ésto, a desaparecer, las ganas de vivir y aprovechar, los sentimientos de que no somos nadie, la sensación de fragilidad..

Los más pequeños inventan historias. Ella dice que volverá porque en el cielo ya hay demasiada gente, que sólo ha ido a trabajar. Los demás intentamos estar tranqilos a ratos. Pero, nos quedamos con la angustia y las lágrimas la mayor parte del tiempo. Abrazados. Hasta ayer, que no sabía cómo era todo esto. Nunca es agradable aunque sea algo que se venía anunciando. Así que bueno, no hace falta nada más que agradecer a quienes han querido estar cerda hoy, y a los que nos quedamos, como suele decirse, fuerza y hacia delante. Buscamos liberarnos como podemos, desahogarnos; escribiendo, llorando, sacando todo fuera.. Poquito a poco superando, no olvidando..