martes, 6 de enero de 2009

Noche de Reyes

Inspiración nula, palabras encerradas. Me sale sola la actitud de resignación, de sin pena ni gloria, de niña caprichosa y consentida. De que parece que alrededor, el ceronueve, no nos ha sentado nada bien. Y eso que, lo mínimo que debería estar, es saltando de alegría por la buena noche de ayer. Pero es que hoy, ha habido un muy justificado mal despertar..

Ayer tuve un montón de regalos, pero los cambiaría todos por ver la cara de mamá con sus inesperadas sorpresas. Había, por lo menos, 60 paquetes! Somos trece, eso sí. Y el salón estaba inundado de papeles brillantes de colores, como una típica estampa navideña. Así pasamos un buen rato, desenvolviendo todo y enseñando orgullosos los jerseys blancos para el futuro uniforme, los collares, el parchís que en vez de piezas tiene vasos de chupito, el colorete o el patito de goma. Bueno, eso yo.

Se me ocurría mucho más que esos tres hombrecillos me podían haber traído. Muchas cosas de esas que no se compran con dinero, también de esas otras que vienen del fondo de las personas... Y magia, magia de la de verdad. No es que sea egoísta o desagradecida, que no, es que necesito..


Pero, al volver a casa me encontré con algo que sí que me pilló por sorpresa. Últimamente había visto que estaba muy de moda este ritual, pero me había tenido siempre al margen hasta que deje de estarlo, lógicamente. Para que negarlo, me hizo ilusión recibir un premio. Y por si fuera poco, dos. Me quejo de vicio, lo sé, pero es que quejarme es un vicio. Todos tenemos algún oscuro deseo, no? :) Sonrisa, por el gesto, porque aunque mucha gente me diga que no puedo vivir de eso, es un detalle que te hace seguir confiando en las personas buenas. Que nos hace falta dejar de ser todos unos gilipollas.


La chica del faro me dejó uno. Y aunque pueda resultar extraño espero que como está dicho, sigamos nuestras huellas. Para no dejarnos perder en el camino. El otro vino de parte de Ayla, quien me ve con buenos ojos y quien me inspira protección y ternura cada vez que me acerco un poquito a ella. Jo, aunque desquiciada de todo estoy sensiblona..
Y aunque tenía la misión de repartir premios, no soy de seguir cadenas, usetedes me perdonen y tengan por seguro que si un día cambiara mis costumbres, repartiría galardones a quienes se detuvieron a leerme aquí, a quienes lo hacían en mi antigua casa, a los que no les importa perder un par de minutos en leer unas palabras más, a quienes se arriesgan a quedarse a mi lado..¡Esos sí que mercen un premio!

¡¡Joder, mierda, a tomar por saco; mañana madrugo!! Pero volveré, y no es una amenaza, son las ganas de sacar fuera este m.i.e.d.o.

2 comentarios:

Paula dijo...

No seas tan impaciente (y te lo dice alguien que cojea de lo mismo). Sólo llevamos seis días del CERONUEVE. Las cosas importantes necesitan su tiempo para imaginarse, crearse y fraguarse a fuego lento, para que el resultado sea inmaculado, perfecto, idóneo para tí.
Y me alegro de que hayas sentido la magia. Aunque sea a 1000 km de distancia, la magia nos puede hacer sentir cercanas.
Que tengas un buen despertar, mi niña.
Y bienvenida a la rutina.

Narkia dijo...

A mi los reyes no me han traido nada material, sin embargo me he topado con caja llena de alegría, de mágica y sobre todo, de mucho valor.
No me gustan las cadenas ni ser cumplida en la vida, pero necesitaba que supieraís que os aprecio y como la vida bloggera nos une, ¿de qué forma mejor que ésta?
Mañana me crearé una nueva rutina, ya que a la de antes no puedo volver.
Descansa. Tu compañera de viaje,
Narkia.

P.D: yo también tengo pendiente Madrid.